Omar Chirinos
Saludos Nazis, cabezas rapadas,
la esvástica como insignia y un fuerte contenido racista en las letras, es la
propuesta que nos intenta regalar la deslucida banda Colombiana “Ko Patria”. No
daré detalles artísticos de la banda ya que no me interesa para nada, hacer
publicidad a los pútridos mensajes que insensatamente vociferan en sus canciones.
Mi intensión en este pequeño artículo es; exponer mi pensamiento y el por qué de
mi rotunda oposición ante la presentación de dicho grupo.
Con un itinerario que abarca
varios países de Latinoamérica, entre ellos (desafortunadamente) Venezuela, específicamente
en la ciudad de Maracaibo, el grupo declarado abiertamente Neo Nazi, ha
divulgado panfletos en las redes sociales, donde confirman su presentación en
la tierra del sol amado/odiado. Por supuesto, esto ha generado una gran polémica, y no es para menos, la banda defiende ideologías racistas, supremacía racial, xenofobia,
homofobia y, por supuesto; proselitismo político de ultra-derecha. Ideales tan
arcaicos y nocivos, propios de la vieja Europa, son un atentado a la tolerancia
e igualdad, que tanto defendemos las
personas con conciencia social. Dicho esto, cuando analizamos el contexto en el
que basan sus canciones, nos damos cuenta de que están totalmente polarizados,
es imposible proclamar “la raza única” en países donde el mestizaje fluye por
la sangre de todas y todos los habitantes, pero como dice una canción por ahí, “se
regocijan en su sabia ignorancia”.
Jamás podre concebir tales
ideales, defiendo el anarquismo y creo en las personas, creo en el bienestar de
todos y todas, creo en la completa libertad, el respeto y la humildad que
genera el despojo de pretensiones de poder y superioridad. Desde estas líneas hago
un llamado al boicot total y rotundo no solo a la presentación de Ko Patria, si
no, a todo lo que intente eclipsar los principios de una humanidad más justa de convivencia libre.